Del cuerpo sin deseo

Author: B. Rimbaud / Etiquetas: ,







No es necesidad, no es ansia, no es anhelo, no es deseo, no es volición, no es imperativo, no es ímpetu.

Es un torbellino caótico sin centro, un huracán sin ojo, un terremoto sin epicentro ni magnitud concreta. La noche que no amanece ni clarea, el llanto ahogado sin fin ni sentido pero que continúa lento y flagelante.

El paso incesante de las horas de ese reloj podrido que es mi vida ya no incomoda: no deseo apurarle ni deseo que se demore más, lo veo únicamente con fatal resignación.

Mis letras, otrora combatientes del feroz fuego de mi pecho que, cual cristalina, lo doblegaban hasta hacerlo flaquear por completo, hoy son espasmos de aire vil ante una llanura rocosa.

Viene un amanecer y otro más, y otro y otro... anochece, más obscuro, más noche y otras vez...

Los libros no animan mi sentir revolucionario ni detonan mi sentir anclando la idea con la sensación descrita.

Apolo no me atrae más...
...Dyónisos me aterra

Bailaba para exorcizar mis demonios, pero mis danzares y mis agitaciones con los brazos no fueron suficientes. Mi cuerpo se encuentra rendido, mientras sus lenguas recorren mi piel y un silbido pasa por mi oído y recorre, una y otra vez, mi mente: 


"Esta vida, tal como la vives ahora y como la has vivido, deberás vivirla una e innumerables veces más; y no habrá nada nuevo en ella, sino que habrán de volver a ti cada dolor y cada placer, cada pensamiento y cada gemido, todo lo que hay en la vida de inefablemente pequeño y de grande, todo en el mismo orden e idéntica sucesión, aun esa araña, y ese claro de luna entre los árboles, y ese instante y yo mismo.Al eterno reloj de arena de la existencia se le da vuelta una y otra vez y a ti con él, ¡grano de polvo del polvo!"*


*Nietzsche, en "La Gaya Ciencia".
Imagen de: http://labuhardilladepuck.blogspot.com/2010/08/hombros-bajos-cuerpo-encorvado-mirada.html

Twitter

Seguidores